No estoy en la onda minimalista, pero tampoco soy una consumidora excesiva, aunque sí debo confesar que como la mayoría de las mujeres, tiendo a acumular cosas, especialmente ropa.
He leído muchos blogs de personas que viajan con muy poco, y muchos de ellos se han inspirado en otros blogs de personas que viven con muy poquito. Algunos casos de minimalismo me parecen muy extremos, quizás es porque al principio no tenía intenciones de vivir con poco, aunque con el pasar de los meses, y cuanto más sitios leo sobre el tema, me he dado cuenta que cada vez me parece menos descabellada la idea. Me ha ayudado no sólo a preparar el equipaje para mis viajes, sino también en organizarme mejor en mi casa.
Cuando pensaba en sacar, regalar, donar, vender o tirar lo que no sirve, sólo pensaba en ropa o zapatos, pero de a poco me fui dando cuenta que poseo demasiadas cosas que no uso, y que superan ampliamente a las cosas que sí uso.
Un ejemplo: el otro día mirando el placard, vi que tenía 7 toallones (y unas cuantas toallas). En mi casa somos sólo dos personas, y utilizamos a diario siempre los mismos dos toallones (el azul y el beige), los lavamos, se secan, y en lugar de guardarlos en el placard una vez limpios, dejo uno en el toallero de la ducha, y el otro en un estante del baño. De los otros 5 toallones, 3 están sin usar desde que los compré (creo que uno me lo regaló mi mamá), y los otros dos me parece que los hemos llevado a la playa alguna que otra vez. Por supuesto cuando pienso en comprar algo para la casa, no pienso en toallones, porque no los necesito, pero me preguntaba por qué tenía 7 si solo usaba dos, y en qué momento después del tercer toallón, adquirí un cuarto, un quinto y hasta un séptimo. Incluso si esos dos que utilizamos se perdieran o se rompieran, tampoco necesitaría comprarme dos de repuesto para reemplazarlos.
También me pasó mirando en las alacenas, cajones y estantes de la cocina. Utilizo a diario 1 sartén, 1 olla mediana, una olla más chica con mango, una asadera y un jarrito (más cubiertos, vajilla, y otros utensilios, obvio), pero sin embargo cuando abro el horno tengo que empezar a sacar cantidad de cosas que no sé si habré usado un par de veces desde que las tengo.
No digo que si somos dos en la casa, debamos tener dos platos, dos vasos y dos pares de cubiertos, pero sí es exagerado comprar de más cuando no necesitamos, o cuando no tenemos pensado reponer o reemplazar lo que ya tenemos.
Hay tres frases que más repiten las personas que tienen una forma de vida minimalista:
-es liberador vivir con poco
-ahorrás dinero y recuperás mucho espacio
-contribuís con el medio ambiente al disminuir el consumo excesivo
Si bien las tres frases son ciertas, no es mi función hablar de eso en el blog, ya que muchos de uds por ahí no necesitan sentirse liberados deshaciéndose de cosas (aunque ayuda), ni tengan la necesidad de ahorrar dinero (aunque viene bien), ni quieran contribuir con el medio ambiente (acá sí me prendo). De todos modos como ya he dicho, y luego de haber empezado a sacarme cosas que no utilizo de encima, y que seguramente le pueden servir a alguien más, lo que más me enseñó todo esto es saber que si para vivir a diario no necesito tanto, menos voy a necesitar para vivir unos días de vacaciones en otro lugar.
En este momento estoy planeando un viaje, y viendo mi lista de cosas para llevar. He logrado reducir la lista a casi la mitad (bueno... un poquito más de la mitad) con tips minimalistas, y sinceramente me pregunto: ¿qué estaba pensando cuando pretendía llevar todo aquello que saqué?????
Les paso algunos ejemplos de blogs que me impresionaron:
Miss Minimalist : yo siempre entro a la sección de viajes (Travel), y saco algunas ideas (y digo "algunas" porque todo no se puede!!)
Viajando Por ahí: no es un blog sobre minimalismo, pero es de una chica que viaja mucho, y que se inspiró en Miss Minimalist para poder reducir su equipaje.
ValeDeOro: otro blog de una chica minimalista, que por un lado adoptó esa forma de vida, y por otro no le quedaba otra ya que viaja en moto. Sus ideas son muy buenas!
En 101 Lugares Increíbles: armaron un post con los 4 niveles de un viajero según su mochila. Yo considero que estoy entre el nivel 2 y el 3, aunque más cerca del 2.
Crónicas de un Argonauta: otra bloguera que se inspiró en el sitio anterior.
Un poquito más extremistas son los chicos del famoso No Bag Challenge. Hay un par de videos en youTube, búsquenlos y verán qué poquito equipaje llevan.
Y en el otro extremo, minimalista total, en los viajes, y en la vida, tenemos a Andrew Hyde, un hombre que posee sólo 15 cosas, y que viaja con ellas, por supuesto.
Mi meta es una cosa intermedia entre lo que soy, y el minimalismo, más que todo en los viajes. No pretendo deshacerme de todo (por lo menos por ahora), pero sí quiero organizarme mejor. En otro sitio por ahí, también leí que lo mejor es empezar con una cosa al día. Si uno pretende ordenar, organizar y descartar todo de una vez, se van a encontrar que es cansador, lleva mucho tiempo, y termina siendo frustrante, ya que muchas cosas las volvemos a poner en su lugar, o peor, las cambiamos de lugar y las apretujamos más para que parezca que está más ordenado y sobra espacio.
Cada día, dedicás un minuto solamente a mirar a tu alrededor y sacar de tu vida algo que no uses, que no te sirva, que sólo lo guardes por recuerdos, que no te entre, que no te guste. Puede ser una prenda, un adorno, una lapicera de esas 20 que tenemos en el lapicero del escritorio y de las cuales funcionan 3, etc. Al cabo de un año nos habremos deshecho de 365 cosas inservibles que ocupaban lugar en nuestra casa.
Ahora, si hablamos de viajes, hagamos la valija con tiempo, y cada día abrámosla o miremos la lista de cosas que llevamos y saquemos o tachemos una. Obviamente va a haber un límite de cosas que podamos tachar, pero al principio siempre vamos a encontrar algo que no nos va a servir de mucho o que nos va a hacer dudar. Podemos empezar por lo más pequeño (jabón, labial, bijouterie) o por lo que está repetido (medias, remeras).
Voy a estar en un par de hoteles, y mirando las fotos que sube la gente en Tripadvisor, y los comentarios, ví que en todos ellos dan shampoo, acondicionador, jabón, y hasta gorrita de ducha. A pesar de que solo llevo uno o dos sachets de shampoo, esos tipo muestra gratis, y un mini jaboncito, ya los saqué de la valija.
También ví en fotos que en las habitaciones ponen una jarra térmica con una taza, sobrecitos de azúcar, té y café en saquitos. Probablemente estos últimos los cobren (o no) pero de lo que estoy segura es que no me van a cobrar por usar la cuchara que está al lado de la jarra. Así que saqué la cuchara de mi equipaje, mientras pensaba: "¿y si en alguna excursión se me ocurre comerme un yogurth?". Jamás comí yogurth en una excursión, es más, no recuerdo cuándo fue la última vez que comí yogurth fuera de mi casa (por qué llevo siempre en el neceser de mi cartera una cuchara entonces?) y si por alguna endemoniada razón se me antoja un yogurth en una excursión, pues entonces me aguanto... tampoco me voy a morir por eso, no?
Lo estoy poniendo en práctica cada día, y por ahora me resulta. Después les cuento hasta donde llegué.
La foto que ven a continuación la saqué de la página The Everyday Minimalist, y es todo el equipaje que llevó esta chica a un viaje de 2 meses por Europa (más una carterita con documentos). Estoy muy lejos de llegar a algo así, de hecho miro mi valija y miro su bolsito y me dan ganas de tirar mi equipaje por la ventana y empezar de nuevo (próximamente voy a postear la lista de viaje general que utilizo para empezar a armar mi equipaje, a la cual luego le voy quitando cosas que sé que no voy a necesitar).
Pasen al link del post y vean. Vale la pena.
fuente |