miércoles, 24 de septiembre de 2014

Cablerío y cargadores

Cómo detesto tener que llevar muchos cables y cargadores. En muchos casos podemos utilizar el mismo cable para varios aparatos, pero en mi caso me he dado cuenta que no es así. Llevo cámara, tablet, celular y mp3. Y los 4 tienen cargadores y conectores diferentes.

Cámara de fotos: tengo dos cámaras compactas. Una es un poco más viejita y la llevo "por las dudas". En realidad, creo que las únicas cosas que llevo "por si acaso" son la cámara y algo de medicación como antidiarreicos o analgésicos. La cámara principal es una Sony Cybershot, de esas que toman panorámicas. Tiene una batería de esas que se extraen y se cargan aparte en su propio cargador. He intentado cargarla con un usb pero no carga nada (bah, o tarda años en cargar), por lo tanto para esta cámara debo llevar el cable usb para bajar las fotos y el cargador de baterías (que encima le tengo que poner un adaptador porque tiene las patitas como un enchufe tipo A).

enchufe tipo A

El conector USB es tipo B, esos cuadraditos que no enchufan en ningún otro artefacto de los que yo tengo.
             
tipos de conectores usb
La otra cámara, la más viejita, no tiene batería sino 2 pilas, por supuesto, recargables... o sea, otro cargador a la valija. El puerto USB es parecido al de la otra cámara, pero con un pequeño borde plástico alrededor, lo cual hace que sea totalmente imposible usarlo en ambas. Una reverenda porquería. 

Uno sería como el blanco que está a la izquierda y el otro como el negro abajo a la derecha.


Tablet: Samsung Galaxy Tab, puerto de carga chato y alargado, sólo para Galaxy, y encima hay que llevar un adaptador OTG para pasar datos porque no tiene puerto usb, sólo la entrada para cargarla, y por supuesto, el adaptador para cargar de la toma de la pared.

usb OTG

Celular: es un Nokia (creo que es ASHA, no me acuerdo el número), y la conexión es tipo Micro-B, que es para pasar datos y para cargar la batería. Ah, y el adaptador para cargarlo a la toma de corriente.

Mp3: uno de Noblex Square. Bien chiquito y sencillo. No necesito más, y  no me gusta meter 500 canciones en el celular, no sé por qué (así como tampoco me gusta usar el celu para sacar fotos, para eso gasté dinero en una cámara, no?). Lleva un Usb Mini-b, y por supuesto el adaptador para enchufarlo a la pared al cargarlo.

Tengo el del medio. Adivinen por qué me gustó?

Mini-b
Por supuesto, los adaptadores para la pared, tanto de la tablet como del celular son diferentes y por algunas de esas leyes de Murphy malditas, no puedo usar el del celular para cargar la tablet. Simplemente no carga, no sé por qué, ya que es un simple adaptador usb de pared, la única diferencia es que uno dice "Samsung" y el otro es el original del teléfono. Ok, llevo sólo el adaptador de la tablet para ambos,  pero justo el adaptador de la tablet es el más voluminoso porque consta de 2 partes que se ensamblan, y que para colmo tiene las patitas como enchufe tipo A (la primer foto del post) lo cual requiere de otro adaptador para enchufarlo a la toma de corriente, el cual, a su vez, depende de en qué parte del mundo me encuentre. Sí, ya sé, llevo un adaptador de corriente de viajes universal, otro bodoque enorme....

el monstruo

Por qué no se toma un enchufe/toma/plug/conector/usb universal y listo? Sí, ya sé que puedo comprarme un kit de viaje con varios picos y plugs, pero ya es un cachivache más para sumar a mis "artículos" de viaje (no les pasa que tienen un montón de cosas, kits y gadgets que las guardan sólo para los viajes, y les ocupa cada vez más lugar?) y además con qué necesidad si ya tengo TODOS  los cables disponibles que existen en el mercado tecno pues también hay que sumar cargadores viejos de teléfonos anteriores, y todos esos adaptadores y conectores de otros aparatos que andan dando vuelta por la casa que pertenecen a otros integrantes de la familia. La próxima vez que me tenga que comprar algún aparato voy a seleccionar una marca y me compro todo Samsung, o todo Sony, etc.

Soy yo o a todos les pasa algo parecido?

En fin... en realidad este post era para mostrar organizadores de cables y cargadores, no sólo para quejarme del cablerío que tengo en casa... Así que para el próximo post (sería la parte II) prometo ideas y tips para organizarlos.


miércoles, 3 de septiembre de 2014

Volver de un viaje: Tips para la vuelta

En un mes me voy de viaje y estoy a full planeando la previa. Para los que no los leyeron, acá les dejo un par de posts con tips varios (hagan click en el link y vayan a la página 6) y acá también. Estos posts tienen recordatorios y consejos para cuando están preparando un viaje, con todas aquellas cosas que nos vamos acordando a medida que se acerca la fecha.
Ahora, la idea de este post de hoy, es ver qué cosas tenemos que tener en cuenta al terminar el viaje, sería todo aquello que hay que hacer apenas volvemos, ya sea porque lo pateamos para después o porque simplemente hay que hacerlo a la vuelta. Veamos:

Anotarte todo: yo me dejo todo anotado en un calendario de escritorio. A veces al volver de un viaje son tantas las cosas que tenemos que hacer, y tanto el revoloteo que aún tenemos en nuestras cabezas que se nos hace difícil recordar todo. En el calendario me anoto todo aquello que debo hacer o planear hacer, a partir de uno o dos días luego de volver, digamos todo aquello que no es tan urgente, pero sí es importante. Puede ser llevar cosas al lavadero, pasar por la casa de alguien para dejar un regalo, souvenir, o devolver lo que nos prestaron para el viaje, preparar algo para el trabajo o la facultad, etc. Parece una tontería pero muchas veces volvemos e inmediatamente tenemos que regresar al trabajo, y entre todo el desorden que tenemos en casa con el equipaje, la ropa sucia, y las cuentas o papelerío que llegó mientras no estábamos terminamos olvidándonos de las cosas más simples.

yo tengo uno así en mi escritorio
Dinero para los gastos: a los argentinos mucho no nos conviene hacer un gasto con tarjeta por los impuestos que te cobran al hacerlo en el exterior, pero también está difícil conseguir dólares o euros, por lo cual, muchas veces nos veremos tentados a usar la tarjeta de crédito. Yo siempre tomo como gasto de viaje, aquello que voy a tener que pagar a la vuelta. Es algo lógico si se ponen a pensar ya que si no tuviéramos la tarjeta tendríamos que pagar con el efectivo que llevamos. En todos los viajes que hice, me dejé separado dinero para pagar la tarjeta a la vuelta. Durante el viaje nos vamos a olvidar de este detalle, pero no saben la alegría que da cuando uno vuelve y encuentra ese fajito de dinero destinado para  la tarjeta!!! Y si en una de esas casualidades no la utilizamos, pues mucho mejor, es plata que nos sobra. Cuánto dinero dejamos para la vuelta? depende de lo que uds sepan o crean que pueden llegar a gastar (obviamente estoy hablando de gastos extras, descontando alojamiento o pasajes). De todos modos no importa mucho, supongamos que separamos (por decir un disparate, ya que se supone que es un gasto que no teníamos pensado hacer) $3000. La cuestión es que es dinero que no lo vamos a gastar porque estará esperándonos en casa al volver. Tómenlo como un pequeño ahorro.

Taxi para la vuelta a casa: Siempre, siempre dejen un poco de plata para volver del aeropuerto (o estación de tren o bus) a casa. Puede que no tengan pensado volver en taxi si es que tienen una parada de colectivo cerca, pero muchas veces el cansancio, el peso del equipaje, y la hora de la vuelta (no es lo mismo esperar el colectivo al mediodía que esperarlo a las 3 de la mañana) hace que nos desesperemos por volver en taxi lo más rápido posible.

Ir al médico: yo siempre saco turno antes de irme, para cuando vuelva. Está bueno hacerse un chequeo antes de viajar, sobre todo si necesitamos recetas para comprar medicación, pero dependiendo del destino, algunas enfermedades tienen tiempos de incubación largos, y los síntomas de algunas patologías pueden aparecer incluso meses después de regresar. Es importante hacer un control médico al volver, contarle el itinerario, si hemos tenido en algún momento fiebre, diarrea, algún estado gripal, alguna alergia, alguna señal de picadura de insecto, o lo que se nos ocurra en ese momento. El médico va a saber qué tipo de estudios hacernos, ya que no es lo mismo contarle que tuvimos un poco de diarrea en París, que en medio de un pueblito africano donde no había agua potable.

Dejar alimentos: Si la casa va a quedar sola durante nuestra ausencia, la heladera se supone que quedará vacía y desenchufada, así que no habrá nada para cuando volvamos. Lo mejor es tener en la alacena (estoy hablando de alimentos no perecederos)  cosas que podamos utilizar si queremos prepararnos algún bocadillo, incluso bebidas sin abrir, ya que no hay nada peor que volver de un viaje y tener que salir de apuro al supermercado. Muchas veces en el afán de querer liquidar todo lo que tenemos en la heladera antes de irnos se nos olvida volver a comprar cosas para la vuelta.
Lo mismo si tenemos mascotas y las dejamos en casa para que venga alguien día por medio o una vez al día a cuidarlas o darles de comer. Compren comida suficiente para cuando estén ausentes, y un poco más para tener en stock al volver.
Si son de los que comen durante un viaje como si no hubiera un mañana, entonces sean precavidos y traten de tener en casa para la vuelta comida más sana. Muchas veces en un viaje uno termina comiendo lo que hay y no siempre estamos acostumbrados a ese tipo de comida. Ni hablar si se la pasaron comiendo pancho, pizza o sandwich... no siempre uno se puede cocinar durante un viaje, a menos que nos hospedemos en una casa o un hostel. No llenen la alacena de bolsitas de snack y chocolates para la vuelta, pongan también opciones más sanas, como latas de atún, algún caldito de verduras de esos instantáneos para preparar, galletitas de agua, algunas barritas de cereal, etc. Nunca sabemos en que estado volverá nuestro estómago luego de un viaje.

Medicación crónica: si la utilizan, compren una caja o blister o envase de más para no tener que estar pendientes de hacerlo los días siguientes. Por ejemplo, si compran medicación una vez por mes, antes de hacer el viaje (siempre suponiendo que se van por más de 20 días o un mes) compren dos envases, y uno lo dejan en casa.

Cuentas por pagar: yo siempre trato de dejar pago todo antes de irme (expensas, impuestos, resúmenes varios, etc), ya sea en el banco o vía online. Para las cuentas que se empiecen a vencer mientras estamos de viaje, si no podemos pagarlas online (muchas veces no hay señal wifi) podemos dejarle dinero a alguien para que lo haga por nosotros, y aún así, estaría bueno dejar separado el dinero (o asegurarnos de que quede un resto de dinero en nuestra cuenta de banco) para aquello que se nos vencerá apenas volvamos.

Avisar que llegamos: sí, parece una estupidez, pero en mi caso que vivo con mi pareja, siempre me olvido de avisarle a mi mamá que ya volví, y me hace quedar muy mal. No sé por qué, pero cuando vuelvo de un viaje, aviso a mi novio (que es quien generalmente me viene a recibir al aeropuerto) y del resto del mundo me olvido. Incluso mis amigos se enteran que volví cuando empiezo a subir las fotos a facebook :-p

Tarjeta de embarque y check in: para cuando todavía no volvimos, pero ya casi estamos volviendo, tenemos que tener en cuenta que hay que hacer el check in y sacar la tarjeta de embarque, si es que viajamos en avión, para la vuelta. En la mayoría de las aerolíneas se puede hacer el check in desde 48hs antes del vuelo hasta 1 o 2 horas antes. Anótenselo por ahí, en el teléfono celular para no olvidarse. En varios aeropuertos están los famosos kioskos para imprimir la tarjeta de embarque. Yo de ser posible, prefiero imprimirla antes de llegar al aeropuerto, al momento de hacer el check in en algún ciber que tengan impresora, o locutorio.


kioskos para el check in
Fuente

 Volver al trabajo: la parte más difícil de un viaje es cuando volvemos a la realidad. Yo siempre prefiero volver un par de días antes a casa, digamos un sábado si es que tengo que ir a trabajar el lunes. Es horrible y deprimente tener que volver un domingo a la noche, y ni te cuento si se nos retrasa el vuelo y son las 3 de la mañana del lunes y todavía estamos en el aeropuerto... Sé que muchas veces se complica porque uno prefiere aprovechar al máximo el tiempo que está de vacaciones, y quedarse la máxima cantidad de días posibles, pero es más relajante arrancar el lunes más o menos descansados sabiendo que por lo menos pudimos lavar algo de ropa sucia o desarmar las valijas.
Ahora, si saben que van a volver con el tiempo justo para dormir unas horitas y salir para el laburo, entonces traten de dejar preparado todo aquello que van a llevar al trabajo (maletín, bolso, cartera, papeles, la camisa planchada, etc).

Fotos, recuerdos, amigos nuevos: dentro de lo que vamos a tener que hacer al volver, están esas cosas que implican compartir toda nuestra experiencia. Yo apenas vuelvo dejo cargando la cámara para poder chequear las fotos, pasarlas a la compu y esas cosas. Lo mismo con la computadora: si la única que tenemos es la que llevamos al viaje, lo más probable es que vuelva con poca batería, y si tenemos en casa otra para el uso diario, seguramente está casi descargada si nuestra ausencia fue larga. Los días siguientes a mi vuelta voy pasando de a poquito las fotos, o videos, y subiéndolos a la nube o a mi facebook.
También aprovecho para anotar, o saludar a todos aquellos amigos nuevos que he hecho en el viaje. Muchas veces uno se pone a hablar con alguien en una excursión o en el hotel o el viaje y da para pasarse los mails. En mi último viaje, conocí a un médico jubilado que también había ido solo a la Isla de Pascua. De casualidad coincidimos en el vuelo de ida y su conexión, y en las excursiones. El había llevado una cámara sumergible, así que pudo sacar fotos un día en que la excursión se hizo  en medio de una tormenta tropical. Nos pasamos los mails para que él pueda enviarme las fotos de ese día, y también otras dentro de una cueva, ya que mi cámara compacta no saca tan buenas fotos en condiciones de poca luz. Pueden creer que él además era fotógrafo? A veces tengo mucha suerte! Hasta el día de hoy sigo en contacto con él via mail, y con algunas otras personas lindas que he conocido anteriormente.

Planificar todo otra vez: hay algo mejor que volver de un viaje y empezar a planear el próximo? Apenas puedo, trato de recordar todo lo que llevé al viaje, lo que me sirvió y lo que no, y voy actualizando mi lista de equipaje así no cometo el error de volver a empacar cosas que no voy a usar. Voy tachando de la lista general (siempre hay algo que lo llevé al divino botón), o agregando aquello que necesité y no llevé (nunca sucedió, jaja).
Si pudimos entablar conversación con otros viajeros, seguramente nos habrán dado ideas para próximos viajes, de sitios de internet copados, de agencias de turismo que cumplen, etc. La idea de planificar el próximo viaje es descartar todo lo malo o lo que no nos sirvió (no se preocupen, de lo malo también se aprende), y recopilar datos interesantes para nuestro próximo destino.