lunes, 16 de diciembre de 2013

Productos novedosos: Hop! the following suitcase

Este producto lo encontré el otro día de casualidad. Es una valija que tiene unos sensores, y puede ser manejada via bluetooth con tu smartphone. Se supone que te sigue a donde vayas, y se supone que es para evitar que se te pierda o te la roben, ya que literalmente la valija va "caminando" detrás tuyo.

Acá va un videíto




No encontré mucha más información que ésto, y obviamente quedan muchas dudas...
cuánto peso puede cargar o mejor dicho, tienen un límite de peso para poder moverse?
supongo que si sos el único en el aeropuerto que va con su valija caminándole detrás vas a estar cómodo, pero si tuvieras varias personas alrededor con sus propias valijas con sensores...se podrá interferir la señal? resultará que te termine siguiendo la valija equivocada?
Por lo que se ve en el video, se tambalea bastante, supongo que depende del suelo. En una página dice que puede "saltar" obstáculos y subir escaleras. Obviamente en el caso de un aeropuerto el suelo es liso, pero no sé qué pasaría si quisiera probarla en las calles de Buenos Aires, primero por los baches, y segundo porque no creo que sepa esquivar los regalitos que dejan los perros en las veredas. Tampoco me imagino si estás apurado y empezás a correr, que la valija vaya a tu ritmo detrás, creo que tiene un alcance de 80cms por lo que leí.
Se me ocurre que es útil en el caso de una persona discapacitada o muy anciana, por ejemplo, pero si solo la puede utilizar dentro de un aeropuerto por el estado de las calles, es útil a medias.
El tambaleo también dependerá de cómo distribuyas el peso adentro, ni me quiero imaginar cómo hará la gente que carga la maleta de manera que tiene que sentarse en ella para poder cerrarla, o una familia que lleva más de una valija, no sé si tu smartphone puede hacer que 4 valijas te sigan (o la familia debería tener 4 smartphones???)
En fin, me parece útil en algunos casos, no en el mío que viajo con un bolsito, ni para los viajeros ultra livianos. Será cuestión de probar, aunque se me hace que el precio no debe ser muy accesible.


                                                                   

miércoles, 11 de diciembre de 2013

Calzado para viajes

Obviamente es cuestión de gustos y comodidad, pero a la hora de elegir un calzado para un viaje, conviene tener en cuenta un par de cosas.
Primero, el destino y lo que haremos ahí, ya sea paseo, excursiones, salidas nocturnas, reuniones laborales, turismo aventura, etc.
En mi caso, siempre llevo calzado apto para trekking, muy cómodo pero lógicamente no apto para ir a tomarme unas copas al Sheraton (igualmente es muy poco probable que esto suceda), y algún tipo de ojota o crocs para utilizar en la ducha, ir a la pileta o playa si es que se puede y de paso, descansar los pies de estar todo el día caminando con las zapatillas cerradas.
-En caso de hacer excursiones de caminatas largas o por terrenos complicados, las zapatillas de trekking son indispensables. He hecho excursiones de trekking, tirolesa y rapel, y en mi grupo vi hombres con alpargatas o mujeres con chatitas. Recuerdo que el guía les preguntó si habían traído otro calzado para cambiarse y ellos contestaron: -No, estamos bien, ésto es re cómodo!
Fue increíble ver las transformación de sus caras a medida que avanzaba la caminata e íbamos pasando caminitos con mucha piedra suelta, charquitos con barro, cuestas de roca resbaladiza, polvareda, y ni hablar del rapel... creo que en algún momento temí por sus vidas. Más allá de que en nuestra vida diaria lo usemos como "calzado cómodo", hay que pensar también en la salud de nuestros pies o piernas. Me dolía ver cómo pisaban cascotes de roca semi filosa, y me desesperaba ver cómo sus pies resbalaban con el polvo en las subidas.
Si saben que van a hacer trekking en lugares de este estilo, lleven calzado especializado. Si no supieran lo que van a hacer hasta llegar allá y ver las opciones que tienen de excursión, aunque sea llévense zapatillas para correr, o por lo menos algo que esté bien sujeto al pie.

-Si fueramos a un destino con playa, lógicamente hay que llevar ojotas o algún calzado tipo croc, o de goma de esos que hay ahora. Acá si pueden ser alpargatas, o chatitas, pues son cómodas, frescas, ocupan poco espacio en el equipaje, y si elegimos correctamente, es calzado que se puede utilizar para salir a caminar o, por qué no, a cenar a un restaurant. Hoy en día se puso de moda andar en ojotas por todos lados, no es mi estilo, pero digamos que la gran variedad de este calzado que tenemos hoy (doradas, plateadas, combinadas, con plataforma, con detalles de strass o cualquier otro accesorio, con formas más anatómicas, etc) es mucho más presentable que las ojotas que se usaban 20 años atrás, esas de goma negra y tiras de lona.
En estos links de la marca Crocs, van a ver la variedad de calzado que existe apto para playa, ducha, pileta o alguna que otra caminata corta por la ciudad. En mi caso prefiero mucho más cualquiera de estos modelos que la típica ojota que siempre, vaya a saber uno por qué, me saca ampolla entre el dedo gordo y el siguiente. Acá para las mujeres, y acá para los hombres.
Hay gente que también opta por mocasines tipo naúticos, o sandalias tipo franciscanas de cuero, o de correa tipo Rider. Hay una marca llamada Swims, que vende zapatos náuticos de caucho y nylon, incluso cualquier calzado de material de neoprene, ya sea tipo "pezuña" o guillermina bajita viene bien.

-Si tuviéramos que hacer salidas más formales, podemos llevar un calzado cómodo que podamos usar aunque sea un par de veces. Cualquier chatita, taco bajito, mocasín o zapato náutico puede ser utilizado para el viaje de ida o vuelta, para salir a comer afuera, para ir de compras, para un tour tranquilo por una ciudad, incluso del color y el material adecuado nos sirven para una reunión laboral. A menos que tengamos que asistir a una boda en el otro extremo del mundo, o a una fiesta de gala, no tiene caso llevar zapatos de taco aguja, o zapatos de vestir de hombre, ya que no los usaremos más de una vez.

Traten de elegir calzado que puedan usar más de una vez, que sean fáciles de limpiar, que no sean de colores claros para que no se note demasiado si se ensucian, que se banquen un día de lluvia y que sean cómodos. Busquen colores combinables con la ropa que llevan, no tiene sentido conseguir un calzado que cumpla con todas las expectativas pero que sea verde flúo con lunares violetas (a menos que sean de su agrado, sobre gustos no hay nada escrito...).
Pruébense el calzado antes del viaje, para ver si realmente son cómodos. Nunca nunca nunca jamás estrenen zapatos en otro destino, mucho menos si son para alguna actividad específica ya que no será lindo ponerse e calzado otra vez al día siguiente con los pies llenos de ampollas reventadas, y además, como dicen las señoras grandes: "el dolor en los pies se nota en la cara".
De más está decir, que si el destino es un lugar muy frío, van a tener que llevar calzado adecuado, botas, o borcegos abrigados para excursiones o tours, y a ésto le tendrán que sumar algún calzado bajito para descansar los pies al sacarse las botas en el hotel o hostel, o para la ducha.
Averigüen cómo seran los lugares a donde irán, qué tipo de restaurants o de discotecas hay. Es al divino botón que se lleven ropa de noche provocativa o demasiado glamorosa si después es un lugar donde la gente va de jean y remerita, recuerden que todo ocupa lugar y suma peso.
El calzado es una de las cosas más pesadas en el equipaje, así que piensen un combo funcional. Para mí la opción ideal sería: 2 tipos de calzado (algo para caminar cómodo, y algo para la ducha o playa) o 3 tipos (algo para excursiones, algo para ducha o playa y algo para salir a recorrer por ahí o para alguna salida nocturna).



                      








lunes, 9 de diciembre de 2013

Carpas


Cómo elegimos una carpa de cero? cómo sé cuál es la que más me conviene?
Hay que hacerse muchas preguntas al elegir una carpa, aunque creo que la pregunta número uno es: La voy a usar siempre de ahora en más, o es sólo para estas vacaciones?
Créase o no, mucha gente compra cosas que cree necesarias para un viaje sin tener en cuenta si luego las va a seguir usando. Por más dinero que tengas (y que no te interese derrocharlo), comprar algo que luego va a estar guardado juntando polvo en la parte de arriba de un placard o en un rincón del garage es un gasto (y un esfuerzo al pedo).
Más allá de eso, nos conviene tener en cuenta:

-Clima y lugar: no es lo mismo un bosque o cerca de un lago, que acampar en alta montaña. Es importante saber de antemano si la vamos a utilizar siempre en el mismo tipo de clima o si vamos a llevarla alrededor de mundo (calor extremo, frío extremo, humedad, lluvia, arena, pasto, nieve, lugares con mucho viento, etc).
-Peso y tamaño: si vamos a andar con la carpa a cuesta todo el viaje, obviamente nos conviene conseguir algo liviano y flexible, por lo cual deberemos sacrificar algo de robustez. Si vamos a viajar en auto, por ejemplo, llevar una carpa grande y pesada no va a ser mucha molestia.
El tamaño depende de las personas que dormirán en ella, y/o del espacio que queramos tener para descansar. Hay que leer bien las medidas de la carpa antes de comprarla, y siempre, siempre verla armada antes, para no llevarnos sorpresas luego.
-Materiales, calidad: la idea es que nos dure varios años y que no se nos rompa o arruine ante la primer lluvia o viento fuerte. Más calidad implica mayor precio, pero por lo menos nos aseguramos que no nos va a arruinar el viaje. Las costuras deben ser fuertes, dobles y en lo posible termoselladas para impedir el paso del agua y la humedad. Las varillas deben ser fuertes y ligeras a la vez. Las más comunes son de fibra de vidrio, y son económicas. Las más resistentes son de duraluminio.
-Armado y desarmado: la idea es que no nos pasemos 3 horas armando y desarmando la carpa ya que les aseguro que les va a quitar las ganas de acampar y de moverse a otros lugares con tal de no pasar por ese engorroso momento. Los modelos de ahora son bastante fáciles de armar, pero igual conviene que por lo menos la hayan armado aunque sea una vez antes del viaje, en sus casas, en el patio, donde sea. Por lo menos sáquenla de la funda donde vino empacada para chequear si tiene todas las piezas necesarias o si no presenta ninguna falla de fábrica.


Tipos de carpas

-Iglú: son las más utilizadas hoy día, livianas y con varillas flexibles que permiten una buena resistencia al viento. Las llamadas iglú de 3 estaciones, están pensadas para primavera-verano-otoño. Son también llamadas de trekking o media montaña. Las iglú de 4 estaciones, están adaptadas para soportar todas las estaciones, especialmente los climas muy fríos. Son también llamadas de alta montaña. Son altamente impermeables y sus varillas más resistentes para ser usadas en condiciones de vientos muy fuertes, nieve y temperaturas bajo cero.
-Canadienses: son las típicas carpas con forma de casita con techo a dos aguas. Son los modelos más viejos y tradicionales. Los materiales son muy duraderos pero son un poco más pesadas que las iglú y bastante más grandes, de hecho, puede entrar una persona parada en el centro. Los modelos más tradicionales no tienen piso.
-Isotérmicas: son utilizadas para actividades de alta montaña, y climas muy fríos. Su estructura consta de dos cuerpos principales, uno exterior y uno interior, así se facilita la conservación de la temperatura adentro.
-Estructurales: son las de mayor tamaño, pensadas para estadías largas, y muchas personas. Ejemplos: refugios, campamentos prolongados tipo expedición, enfermería, almacenes, etc.
Son las más cómodas por su tamaño, pero las más pesadas e incómodas de trasladar.

Teniendo en cuenta todo esto, podemos empezar a ver cuál es la carpa que más va a colmar nuestras expectativas. Por supuesto, de más está decir que cualquier tipo de carpa necesita buenas condiciones de limpieza y mantenimiento, por lo que es necesario leer bien las especificaciones para cada tipo de material y evitar así al guardarlas que se arruinen por la humedad, el moho, desgarros, etc.

                                                                         

miércoles, 4 de diciembre de 2013

Mochilas

Este es un compiladito sobre mochilas, tipos, usos, y esas cosas. En cuanto a presentar una mochila como ideal, voy a decir que eso depende de gustos y del uso que queramos darle, ya que muchas veces depende del viaje que vamos a hacer.
Cuando uno habla de mochilas para viajar, generalmente piensa en "mochileros" con sus clásicas mochilas ocupándoles toda la espalda y sobresaliendo tipo joroba por encima de sus cabezas, pero no necesariamente tenemos que viajar con una casa en la espalda. Si bien nunca viajé como mochilera, me resulta muy cómodo llevar una mediana, como equipaje de mano y que a la vez me sea cómoda para moverme todos los días del viaje.

Las podemos clasificar por la capacidad en tres grupos:
-hasta 40 litros: las más pequeñas, aptas para una excursión de día, para llevar lo mínimo indispensable.
-de 40 a 65 litros: medianas, más aptas para excursiones de día o cuando vamos a pasar una noche fuera.
-más de 65 litros: tipo mochilero, grandes, para acampar y pasar varios días fuera de casa.

Lo primero que me pregunto para elegir una mochila es:

¿Cuántos días voy a viajar y a dónde?
Digamos que si voy a pasar un mes recorriendo y acampando en las montañas, obviamente voy a necesitar una mochila donde me quepa TODO lo necesario. Por supuesto elegiría una tipo mochilero, grande y cómoda. Llevar TODO adentro no quiere decir que metamos cualquier cosa... un buen mochilero sabe qué es imprescindible, qué puede llegar a serlo, y qué es innecesario.
Por más grande que sea, conviene comprar o conseguir aquella  mochila que nos sea cómoda para nuestra contextura física. Mi amiga Vero, pedía prestada una a un amigo que en sus días de soltero viajaba solo por el mundo, pero a ella le quedaba gigante. La mochila tenía una estructura armada en la parte que daba a la espalda, y que a Vero se le clavaba en la parte baja de la cintura, no importa cuánto ajustara o desajustara las tiras. No todos tenemos el mismo tamaño, ni en altura ni en anchura, por lo que la mochila perfecta para una persona puede no serlo para otra. Es importante la estructura armada que lleve por dentro, y más importante aún que nos quede cómoda al cuerpo.
Aproximadamente, una mochila de 50-60 litros puede llevar unos 12 o 14 kilos (puede llevar más si metemos cosas muy pesadas), así que no sólo hay que pensar en tamaño sino en el  peso que tendrá una vez llena.

¿qué voy a llevar?
Obviamente, esto depende del viaje que hagamos. Si vamos de campamento, vamos a tener que sumar carpa, bolsa de dormir, cacharros varios, alguna que otra herramienta, etc, y todo agrega peso y volumen.  De nada me sirve comprarme una mochila apta para campamento si luego no voy a repetir más la experiencia, ya que me quedará de clavo una mochila gigante que no me servirá luego para un viaje de pocos días, y mucho menos si voy a hospedarme en un hotel.
Las tiras de la mochila son muy importantes, deben ser anchas para que no se nos incrusten en los hombros, acolchadas en lo posible y de buenas costuras para evitar que el peso del equipaje las desgarre. Si tenés que comprarla nueva, probala antes para asegurarte que va con tu talla. También es bueno verificar que tenga correas externas para ajustar a la mochila y así compactar su contenido, primero para tener más espacio disponible, y segundo para que quede todo el peso centrado.
Si viajás acompañado, lo mejor es repartir las cosas que van a llevar. Tené en cuenta el clima para evitar llevar peso de más (o de menos), y también para considerar la humedad o lluvias, ya que si la mochila tiene una capa impermeable, mucho mejor.

¿cómo acomodo las cosas?
no importa cuál sea el tamaño de nuestra mochila, siempre conviene que tenga al menos una división o compartimento adentro, y un par de bolsillos afuera. Lo ideal es distribuir bien el peso. En el fondo conviene ubicar lo que sea más rígido, que no se arrugue ni aplaste y que no necesitemos con frecuencia. No necesariamente lo más pesado va al fondo. Más cerca del cierre o tapa nos conviene ubicar lo que queremos que no se aplaste,  que sea más liviano y que queremos tener a mano. Yo suelo poner arriba la cámara de fotos, un pequeño neceser con pañuelos de papel, documentación, celular, lapicera, algún abrigo tipo impermeable o rompeviento, alguna bolsita para residuos y también aprovecho los bolsillos externos.
Conviene conseguir una mochila con un buen cinturón, para poder localizar el máximo peso en cintura y piernas y no en la espalda, hombros o cervical.



                                                                    fuente

No es lo mismo un campamento, un tour por ciudades europeas o turismo aventura. Según mi opinión, una mochila bien grande es para un acampar varios días.
Si hacemos una lista de lo que habría que llevar para cada lugar, nos daremos cuenta del tamaño de mochila que necesitaremos:
Camping: bolsa de dormir, carpa, manta, linterna, cocina a gas o parrilla, cacharros varios para cocinar, lámpara, utensilios varios, herramientas varias, colchón inflable, botiquín, documentación, botella o cantimplora, cámara, gps o celular, algo de comida, pilotín o capa impermeable, abrelata, radio, navaja, toda la ropa, un par de calzados.

Excursión (trekking), o tour: botella o cantimplora, protector solar, botiquín, gorra de sol, documentación, cámara, gps o celular, snacks, pilotín. Acá la ropa y el calzado lo llevamos puesto, sólo habría que agregar alguna camperita liviana por si refresca en algún momento.

Les dejo un link de mochilas grandes, como para acampar, todas arriba de los 60 litros.

En este otro link de Trekkinn.com, hay varias opciones, divididas en cuanto a la cantidad de litros, mochilas familiares, mochilas de hidratación, etc. (En esta página, si se fijan en las solapas de arriba, van a ver que están clasificadas en Trekkinn, Snowinn, Runnerinn, Bikeinn, y así, digamos para cada tipo de actividad. Párense con el cursor en una solapa y elijan la etiqueta de Mochilas y/o Bolsas). Es uno de los sitios más completos que encontré.



                                                         









lunes, 2 de diciembre de 2013

Productos novedosos: Cocoon

Cocoon

Este refugio está diseñado para utilizarlo como "tienda de campaña" o "carpa colgante" para aquellos que gustan de acampara al aire libre.
Se cuelga de un árbol y tanto su diseño como los materiales con que está fabricado están pensados para ser utilizado en condiciones extremas.

fuente original

Si se fijan en el link que va a la "fuente original" van a ver muchos modelos más, incluso algunos para 2 o 4 personas.
Este modelo de capullo o gota en particular me parece un poco incómodo para pasar una noche, digamos que no tenés mucho espacio para estirarte, y ni me quiero imaginarme si hay mucho viento, el bamboleo constante todo el tiempo. Me parecería más cómodo uno así pero con la base recta, tipo triángulo o cuadrado.
Lo bueno que al estar colgado, no se presenta el problema de posibles alimañas entrando a la tienda.


En esta otra página, Cocoon Tree, la opción luce bastante más cómoda, pero me parece más complicada de isntalar ya que va sujeta de múltiples ramas. Lo bueno, es directamente una cama flotante, y además, podés diseñar la tuya a piacere. La desventaja: es un temita instalarla y debe ocupar bastante espacio, digamos que no me lo imagino plegado en una mochila.



fuente